RedCLARA utiliza cookies para ofrecer la mejor experiencia web posible.

Al continuar y utilizar este sitio, usted acepta que podamos almacenar y acceder a las cookies en su dispositivo. Asegúrese de haber leído la Política de Cookies. Saber más

Acepto

REUNA: Tres décadas de transformación en ciencia y educación en Chile

Desde su creación en 1990, Red Universitaria Nacional (REUNA), ha sido un pilar fundamental en la transformación científica y educativa de Chile. A lo largo de 30 años, REUNA ha facilitado la conexión entre universidades e instituciones de investigación tanto al interior de Chile como con la región y el mundo, como miembro fundador de RedCLARA. Asimismo, ha promovido proyectos y colaboraciones cruciales en áreas como Transformación Digital, Telemedicina, Ciberseguridad, Computación de Alto Rendimiento y Observación de la Tierra, que han impulsado grandes avances. Mientras celebra sus éxitos pasados, REUNA se prepara para enfrentar con determinación los futuros desafíos, enfocándose en expandir su impacto a todos los rincones del país, apoyar a la comunidad académica e investigadora, y fortalecer su red de socios y alianzas.

REUNA es una red consolidada y con una enorme proyección, que tiene un rol esencial en el fortalecimiento del ecosistema digital y la innovación de América Latina y el Caribe.  Como miembro activo de RedCLARA, contribuye al fortalecimiento de la red regional que conecta instituciones académicas y de investigación a lo largo del continente, facilitando una colaboración fluida y el intercambio de datos cruciales. Un ejemplo significativo de esto, es que la red chilena, junto a la de Ecuador, Brasil y Argentina, fueron protagonistas en la primera fase del programa BELLA (Building the Europe Link to Latin America), implementado por RedCLARA y cofinanciado por la Unión Europea, a través del cual se conectó directamente por primera vez a América Latina con Europa, a través de un cable submarino de fibra óptica. Este avance no solo ha mejorado la conectividad global para universidades e instituciones científicas en la región, sino que también ha reforzado la posición de REUNA como un nexo vital en la red internacional, promoviendo una colaboración continua entre investigadores y académicos de ambos continentes.

La red chilena forma parte de SPIDER (EU-LAC Strategic Partnership for the Implementation of Digital Dialogues in R&I Cooperation), un proyecto financiado por la UE y formado por nueve organizaciones, que impulsa el uso de la infraestructura de BELLA para obtener resultados impactantes en la cooperación UE-ALC en investigación e innovación. SPIDER se alinea a los esfuerzos del proyecto BELLA II, implementado por RedCLARA y cofinanciado por la UE.

En el dinámico panorama de las redes académicas, Luis Eliécer Cadenas, director ejecutivo de RedCLARA, destaca el rol pionero de REUNA. En sus palabras, el papel que una organización como esta cumple en Chile es fundamental para todo el sistema educativo, universitario y de innovación. “Es muy notable que REUNA haya sido una de las primeras redes nacionales de educación e investigación en formarse en Latinoamérica, pero es aún más destacable cómo se ha desarrollado a lo largo de los años”, indica.

Y agrega que “REUNA ha demostrado una vocación continua por servir a sus socios, las universidades y centros de investigación chilenos. Ha construido, paso a paso y con mucha constancia y esfuerzo, algo que no es nada fácil de lograr: un equipo que está orgulloso de lo que hace y que comprende lo trascendental de su labor. Larga vida a REUNA y muchas gracias de parte de toda Latinoamérica, porque lo que hace REUNA nos fortalece a todos”, destaca.

Una trayectoria de innovación y crecimiento

La historia de REUNA inicia en un Chile en proceso de modernización. Fundada por las universidades del Consejo de Rectores (CRUCH), con el apoyo de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (CONICYT) -ahora Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID)-, la red fue constituida en 1994 como la "Corporación REUNA". Desde entonces, ha sido fundamental en la mejora de la conectividad académica del país, posicionándose como un aliado estratégico para instituciones de educación superior e investigación.

Desde 2004, la Corporación ha crecido de 13 miembros a más de 50 organizaciones asociadas a la fecha, consolidándose como una poderosa red de colaboración, con presencia desde Arica a Punta Arenas y un robusto posicionamiento internacional.

Entre los hitos más significativos de su historia está el haber participado en la fundación de REDCLARA, aportando su experiencia en infraestructura y sus conocimientos, a principios del siglo. En esa misma época, REUNA conectó a Chile con Internet2, la red avanzada de Estados Unidos, marcando el inicio de su expansión global. En 2004, consolidó su rol al integrarse con la red avanzada europea GÉANT, mediante REDCLARA, fortaleciendo su conexión con las principales redes académicas a nivel mundial.

En 2005, AURA (Association of Universities for Research in Astronomy) pasó a ser la primera institución no universitaria en unirse a REUNA, una alianza fundamental que sirvió de precedente para que los principales observatorios astronómicos del mundo se instalaran en Chile, con la confianza de que contarían con las condiciones de conectividad necesarias para sus operaciones. “El desarrollo de la red ha sido un trabajo conjunto a socios y observatorios, que actúan como catalizadores de grandes movimientos de datos y requieren infraestructuras capaces de responder a los desafíos de la astronomía y la comunidad académica en general”, destaca Paola Arellano, directora ejecutiva de REUNA.

En 2012, REUNA, en colaboración con el Centro de Modelamiento Matemático de la Universidad de Chile, inauguró la primera Red Fotónica (que utiliza la luz para transmitir datos a través de fibras ópticas en lugar de señales eléctricas) para Ciencia y Educación en la capital chilena, Santiago. Esta red mejoró significativamente la infraestructura para la investigación y el desarrollo científico y facilitó el acceso al Laboratorio Nacional de Computación de Alto Rendimiento (NLHPC).

Durante la pandemia de COVID-19, REUNA se adaptó rápidamente a las nuevas demandas. Con el cierre de universidades, las medidas de confinamiento y el auge del teletrabajo, la red aumentó sus videoconferencias de 7,000 en el año anterior a más de 3 millones entre 2020 y 2021. Este aumento no implicó necesariamente grandes costos para los socios, sino que se logró gracias a la sinergia y el trabajo colaborativo. La Universidad de Concepción también contribuyó con una plataforma de telemedicina para consultas en línea y REUNA desplegó servidores virtuales para manejar la alta demanda. Esta plataforma tuvo un impacto considerable, atendiendo consultas no solo desde Chile, sino también desde otros 143 países.  

En 2024, REUNA y el Parque Astronómico Atacama inauguraron una nueva conexión de fibra óptica en Cerro Toco, cerca de San Pedro de Atacama, que ayudará a transmitir los datos de los proyectos astronómicos internacionales presentes en la zona, fortaleciendo la colaboración y la investigación científica en esta privilegiada zona geográfica.

Conectando el fin del mundo

Mirando al futuro, REUNA proyecta expandir su red hacia la Antártica. Con Punta Arenas como punto de partida estratégico, este ambicioso proyecto pretende conectar a más de 20 países que operan en el continente blanco, facilitando así la colaboración entre estaciones científicas en uno de los ambientes más extremos del planeta.

"Punta Arenas, la ciudad más austral de Chile, sirve como puerta de entrada para más de 20 países que realizan expediciones científicas a la Antártica, por lo que para nosotros extender nuestra red hasta esa ciudad era fundamental, y eso lo hemos logrado este año, con el proyecto Patagonia. Pero nuestro sueño es llegar más allá. Actualmente, el gobierno chileno está liderando un estudio de factibilidad para esta expansión, así es que estamos entusiasmados con la posibilidad de ser parte de esta iniciativa y apoyar la interconexión de los centros antárticos a las redes globales de investigación y educación", afirma Arellano.

Un desafío permanente para REUNA es ampliar y fortalecer su infraestructura de red. La red está desarrollando canales de salida físicos, estableciendo puntos de acceso a través de RedCLARA y colaborando con el programa BELLA II para mejorar la conectividad, ampliar la cobertura a áreas remotas y aumentar la capacidad de transmisión de datos. “Chile enfrenta desafíos como incendios, terremotos y maremotos, y estas mejoras son cruciales para garantizar la continuidad y resiliencia de nuestra red", puntualiza.

La colaboración de REUNA con el Centro Copernicus, que gestiona el programa Copernicus de observación de la Tierra, se alinea con el programa BELLA II al fortalecer la infraestructura digital necesaria para acceder a datos satelitales. Esto facilita la integración de datos de Copernicus en investigaciones y proyectos académicos, potenciando el desarrollo científico y tecnológico en la región.

En el marco de un nuevo acuerdo con ESO (European Southern Observatory) y ALMA (Atacama Large Millimeter/submillimeter Array), REUNA ampliará en 10 veces la capacidad de red actual para la transmisión de datos astronómicos desde el desierto de Atacama al mundo. "El observatorio ALMA está en un profundo proceso de actualización, que requerirá un incremento importante en la capacidad de transmisión de datos, al igual que los telescopios de vanguardia de ESO, como el Very Large Telescope (VLT) y, en un futuro, al Extremely Large Telescope (ELT), el telescopio óptico infrarrojo más grande del mundo en construcción. Esta nueva alianza es reflejo de la confianza que hemos construido durante una década de colaboración y nos permitirá continuar brindándoles las condiciones de conectividad necesarias para mantenerse en la frontera de ciencia", indica Arellano.

REUNA es un ejemplo de esfuerzo continuo por innovar y ha demostrado cómo la cooperación y la innovación pueden transformar el panorama académico y científico de un país, y contribuir al de toda la región. Arellano destaca que la clave del éxito ha sido el trabajo con las personas y la construcción de una red de confianza: “La red se basa en esta colaboración y confianza mutua, extendiendo su impacto más allá de Chile, hacia una perspectiva global”.

Arellano también enfatiza el rol de RedCLARA en fomentar una visión global en investigación y docencia, y la importancia de colaborar con redes internacionales para fortalecer la comunicación y cooperación global. Finalmente, expresa un agradecimiento profundo a los socios de REUNA por su compromiso, confianza y contribución continua al éxito de la corporación.

Rambla República de México 6125.
Montevideo 11400. Uruguay.

Proyectos en ejecución