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MEMORIA INSTITUCIONAL RedCLARA 2019


Avances y Ajustes de la Estrategia

La estrategia de RedCLARA está basada en cuatro grandes pilares: Cooperación, Sostenibilidad, Innovación y Relevancia. Los objetivos y avances alcanzados durante el 2018 y el 2019 estuvieron principalmente orientados a fortalecer los pilares de la sostenibilidad y la relevancia. El fortalecimiento de estos dos pilares era prioritario para reorientar aspectos de la organización que son fundamentales para su desarrollo.
 
La sostenibilidad de la organización depende de múltiples factores: costos de operación y mantenimiento de los servicios, capacidad de pago de sus redes miembros, cantidad de servicios disponibles, capacidad comercial y administrativa para ampliar la base de ingresos. Durante el 2019 se completó una reducción de costos de infraestructura, operación y administración de un 60% del presupuesto anual planteado para el año 2018. Esta reducción de costos tan importante nos permitió redefinir las tarifas que aportan nuestras redes miembros para el funcionamiento de la organización. Es importante recordar que RedCLARA es una organización no gubernamental, de derecho internacional sin fines de lucro, que administra un recurso (su plataforma) que es un bien público para la región. Esto genera los problemas típicos que todo bien público sufre, y que se pueden resumir en fallas de mercado y externalidades económicas que impactan continuamente su funcionamiento.
 
Esta reducción de costos requirió que buscáramos el apoyo de nuestros proveedores de servicios de Telecomunicaciones, para renegociar aquellos contratos cuyas estructuras de costos y características de servicio hacían inviable la organización. Estas negociaciones se completaron felizmente, y aunado a las otras variables antes mencionadas, nos permitieron reestablecer un equilibrio clave para que podamos avanzar en otros aspectos de la estrategia. Esto se complementa con el desarrollo de un portafolio de productos y servicios que implementamos durante 2019 y amplía las fuentes de ingresos para la organización y para sus miembros; esto permite apoyar más fuertemente a las redes nacionales de investigación y educación, sobre todo a aquellas que cuentan con menos recursos. Algunos ejemplos importantes de esto son la implementación de servicios de federación en la nube, de eduroam en nube, de red nacional de educación e investigación virtual y una serie de productos y servicios negociados regionalmente con varios proveedores para abaratar sus costos para las redes nacionales y sus instituciones; es el caso de los acuerdos establecidos con Zoom, AWS y Analytikus.
 
En cuanto a la relevancia de RedCLARA, tanto para sus miembros directos como para otros beneficiarios indirectos, ésta depende de aspectos como la capacidad de apoyar el desarrollo de las redes nacionales, ofrecer servicios que sean de interés y utilidad para la comunidad académica y de investigación, la vinculación continua con organismos multilaterales como el BID, la CAF y, muy especialmente, la Unión Europea, que siempre ha sido y sigue siendo uno de los apoyos mas importantes para nuestra organización. Este pilar se ha visto fortalecido a través de nuestras acciones durante el año, produciendo el reconocimiento de las redes socias y también de otros miembros de esta comunidad.

De Cooperación a Colaboración

El tercero de los cuatro pilares es la colaboración. En este aspecto hemos hecho un pequeño ajuste a la estrategia para diferenciar los términos cooperación de colaboración, y hacer énfasis en el rol de RedCLARA de fomentar la colaboración. El término trabajo cooperativo hace referencia a una o varias tareas u objetivos que son alcanzados al dividirlo entre los participantes de la cooperación, de tal forma que cada uno es responsable de la resolución de una porción del problema. Por otra parte, la colaboración se refiere al involucramiento mutuo entre los colaboradores para llevar adelante el objetivo o la meta. La diferencia es pequeña pero sustancial porque el trabajo colaborativo, por su naturaleza, incentiva la innovación y la creación de valor para todos los participantes.
 
La colaboración es un témino que ha adquirido especial trascendencia y relevancia en el marco de los grandes cambios asociadas a la transformación digital de la economía. Los términos “economía compartida”, “economía gig” y algunos otros, dan cuenta de una lógica distinta en el funcionamiento de las organizaciones. Algunos autores hablan de los dos lados de la demanda y de cómo las organizaciones están invirtiendo la forma en que aportan valor a través de la interacción con sus comunidades. Esto es de vital relevancia para las redes nacionales y para RedCLARA como la plataforma que regionaliza las capacidades nacionales. Esta comunidad, colaborando, puede producir grandes transformaciones e impactar positivamente en la educación y la ciencia en la región latinoamericana. Por ello, en los próximos años estaremos promoviendo, en trabajo muy estrecho con las redes nacionales, vínculos de colaboración con todo el ecosistema, vínculos que sean capaces de generar valor para todos. Somos una comunidad que está acostumbrada a cooperar, pero no necesariamente a colaborar. Esto debe incluir a todos los actores que forman parte de la propuesta de valor, incluyendo proveedores y hasta, incluso, competidores, si los hubiera.
 
Innovación

Finalmente llegamos a un componente que deseamos resaltar de la estrategia, la innovación. La innovación en nuestro contexto debe ser entendida de dos formas: la de nuestra comunidad para desarrollar mayor valor para sus participantes, y como el medio para apoyar, desde redes y universidades, los procesos requeridos para producir competitividad y desarrollo económico. Este último componente recibirá gran atención durante el año 2020, ya que estaremos colaborando para promover el rol del sector universitario y de investigación en propulsar los procesos de transformación digital que puedan mantener competitivos a nuestros países y producir desarrollo económico. Esto, creemos, impactará favorablemente en muchos problemas que aquejan a la región. ¿Qué podemos ofrecer las redes académicas en este ámbito? Mucho. El apoyo a procesos de capacitación en el uso y aplicación de tecnologías claves (como el Internet de las cosas, Inteligencia Artificial, Blockchain y otras), la experimentación con estas tecnologías, la provisión de espacios de “laboratorios de prueba” y muchos otros. Para esto estamos evaluando diversos modelos, uno de los que nos ha llamado la atención es la creación de hubs de innovación digital en la región. Estos hubs requieren de la participación de muchos más actores que los que tradicionalmente han interactuado en nuestro ecosistema, incluyendo a los grandes fabricantes de tecnologías, las agencias nacionales y regionales de fomento al desarrollo y organismos multilaterales como el BID, La CAF y la Unión Europea.
 
Hoy vemos el futuro con optimismo gracias a los cambios que hemos logrado realizar y estamos listos para avanzar a metas más relevantes para nuestra comunidad.

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